En general, la normativa recoge como equipos de protección individual obligatorios a la hora de fumigar: buzo, calzado de protección, guantes de protección química y  equipos de protección para las vías respiratorias. Pero, con la de opciones que hay, ¿cómo sé cuál debo elegir?

Para responder a esa pregunta debemos saber que los 4 básicos para fumigar son:

Traje de protección química tipo 5/B o 6/B

Guantes de nitrilo que cumplan la norma En374

Gafas no estancas de montura integral (para que el ojo respire)

Máscara completa o Semimáscara con filtro A2P3

Buzo de trabajo

Con el uso de un buzo de trabajo se busca dar seguridad al cuerpo del trabajador, en este caso, es importante elegir correctamente la talla y, además, que ofrezcan un perfecto ajuste en cuello, muñecas y pies para que no se filtre producto.

El tipo de mono de trabajo que se escoja dependerá de la peligrosidad que presente el producto que se manipulará. Podrán escogerse monos desechables o monos de trabajo normales, como pueden ser los de algodón. Sin embargo, en función del que se elija se deberá seguir un tratamiento u otro después de la fumigación.

Calzado de seguridad impermeable

En cuanto al calzado adecuado, lo más recomendable es escoger unas botas de goma altas, resistentes a productos químicos y que puedan colocarse por fuera del buzo, en caso de que se fumigue con líquido, y por dentro, en caso de que se fumigue con polvo.

Tras las tareas de fumigado será muy importante la limpieza de las botas puesto que si los productos utilizados son corrosivos pueden dañar el material reduciendo su vida útil.

Guantes de protección

Esta es una de las partes que mejor se cumplen por parte de las personas que realizan tareas con fitosanitarios. En cualquier caso, los guantes de protección química deben ponerse siempre por debajo del mono. Las características básicas que deben cumplir los guantes de protección química son:

Impermeabilidad, para ello se deben escoger guantes de nitrilo.

Ergonómicidad y flexibilidad, que se adapten a la mano.

Resistencia a cortes y abrasiones.

Suficientemente altos como para quedar debajo de las mangas.

Protección facial

Este tipo de protección es fundamental. Para nosotros nos parece de vital importancia proteger esta parte del cuerpo tan importante y tan expuesta durante el proceso.

¡Un truco! Escoge unas gafas de protección de montura integral no estancas, para conseguir que se renueve el aire dentro del ojo y así éste no se irrite.

Protección respiratoria

Y, por último, una de las partes más conflictivas y más importantes, el uso de mascarillas. Dependiendo del tipo de fitosanitario se podrán utilizar mascarillas desechables, medias máscaras, máscaras completas o, llegar incluso a utilizar, equipos monitorizados en casos de riesgos extremos.

Es especialmente importante evitar la inhalación de estos químicos pues no suelen producir daño inmediato, sin embargo, sí a medio y largo plazo.

Limpieza de los equipos de protección individual

Para la limpieza de vuestros equipos de protección, os proponemos seguir la recomendación del fabricante en cada caso.

Sin embargo, un consejo muy útil es que siempre se debe tener en cuenta nuestra protección mientras realizamos la limpieza. Por ejemplo, no debemos quitarnos los guantes de protección química hasta que no hayamos limpiado las botas.

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